A veces escribir es tan necesario como respirar. Es como sudarte a ti mismo tras un día de tórrida sequía, de bochorno que dilata la mente en un afán de sobrepasar los límites que impone la rutina. Uno quisiera engarzar gemas de imágenes en el metal del sentimiento, moldear una joya en el crisol que habita en nuestro pecho, avivar las brasas que laten en las venas, aventar el humo que nos ciega y licuarse en tinta derramada, en filas de hormigas con alma de enjambre.
Es un zumbido que proviene de la espalda del silencio, allí donde habita la oculta melodía que rige nuestra vida, un patrón de notas repetidas que subyace en nuestros pasos con anhelo de ser canción, si asumimos la derrota del control y la gracia del instinto.
Instinto. Dejarse ser tal como eres. Renunciar a proyectarte como quisieras ser, como quisieron que fueras, como podría haber sido. Sólo ser. Dejar de estar. Nada más y nada menos. Conjugarse en reflexivo y volverse acción a lomos de adjetivos.
Soltar las bridas de tu boca, azuzar a las palabras en pos de una visión, cabalgar por senderos que nadie hoyó porque nacen tras tus pasos. Las crines del alma al viento, los ojos entornados por la luz que nos deslumbra, la lengua aleteando en la boca.
A veces escribir es leerte a ti mismo una epopeya, aún sabiendo que puede que nunca seas el héroe que el guión exige.
Januman
"Las crines del alma al viento"
ResponderEliminarY a quién le importa lo que exija el guión???
Soltémonos las crines y vivamos.
Oye, Januman ¿vas a organizar fiesta en la buhardilla por el año de blog?? Fue en junio no???
Y todos para uno, Lady.
Buenas noches.
Se trata de un guión que se urde en el telar de los anhelos más íntimos, aquellos que ignoramos o preferimos ignorar porque nos ponen cara a cara con el vacío de una vida estéril.
ResponderEliminarSí, Edda, habrá que pensar algo para celebrar que este navío ha sobrevivido a un año de travesía pese a errores de rumbo, vias de agua y amenazas de naufragio. Se admiten propuestas.
Hoy me he acordado del corto que nos recomendaste:
ResponderEliminarA Flor Máis Grande do Mundo (José Saramago)
Habrá que dedicarle un entrada, Janu.
Un beso.
Ey, Mr, buena entrada, me ha gustado. A lomos de adjetivos, es buena metáfora. Me ha gustado el ritmo al leerte.
ResponderEliminarYo opino como Edda, toca fiestuki, ya es hora de que la cervecita vuelva a pasear por las mesas!!!
Un beso, Mr.
LADY JONES
Saramago, un abuelo niño entrañable, si que merece un homenaje.
ResponderEliminar¿Fiesta de lacerveza? Eso está hecho!!! ¿Ponemos piñata?
Hoy al salir de mi trabajo,conduciendo mi coche y escuchar la noticia de su muerte, he sentido una triste sensación y se me han caido unas lágrimas.
ResponderEliminarEl estaba preparado para irse en cualquier momento, sin miedos, siempre hablaba de la muerte como una parte más de la vida.
Tuve la suerte de conocer personalmente a José Saramago, unas horas antes de la intervención en Irak de Bush, T. Blair y Aznar. Unos cuantos sentimos una energía especial al oirle y nos impulsó para echarnos a la calle y gritar cuando fué necesario.
Os aconsejo que si podeis,leais el discurso que pronunció cuando le dieron el premio Nobel de Literatura. Es entrañable, narra sus orígenes absolutamente humildes.
Se merece un feliz descanso.
Su vida sí que fue una epopeya.
Ha dejado una rica cosecha para la humanidad.
-----------------------------------------------
¡Ahhhh!,tendremos que ir pensando en la música para el día de la fiesta de cumple.
Abrazos a la pandilla.
Para mi que escribir sea necesario para respirar no es a veces, sinó siempre y aceptarse a uno mismo, una epopeya, ciertamente.
ResponderEliminarBuen día, Januman
¿ Nos transformamos en "la epopeya del heroe vulgar que revela un valor como el individualismo " ?
ResponderEliminar...
Eso creo.
Instinto dices.
Dejarse ser tal como eres.
Soltar las bridas que nos atan, cabalgar al viento.
Ser salvaje es vivir mas libre es soltarse de rigidez, es vivir más y cuestionarse menos,es esquivar lo que oprime. Y por lo general nosotros somos nuestros propios opresores.
La epopeya es esa.
Al viento
Juncal.
Colores: me traes recuerdos compartidos de aquellos días, de una voz clara y rotunda con ecos telúricos.
ResponderEliminarBenvingut Vida, yo a veces me resisto a escribir, quizás sea el miedo a esa heroica mirada del negro sobre blanco, porque a veces escribir duele...
Juncal, claro que nosotros somos nuestros peores opresores. La auténtica revolución esta por vivirse adentro de nosotros.
Sudarte a ti mismo. Eso me ha gustado. A veces te sudas en palabras...y luego respiras....y respiras antes y durante. Me ha hecho pensar en cómo sudo yo mis cosquillas internas.
ResponderEliminarMe apunto al aniversario. Dejaré mis compromisos laborales y familiares (estoy deseando buscar excusas), que ya serán menos...